miércoles, 30 de septiembre de 2015

A 15 años de la histórica medalla de plata de Las Leonas

-ADN de Atletas-

 

En los Juegos Olímpicos de Sidney 2000, se habla del inicio de los éxitos de estas mujeres en el hockey sobre césped, llegando a la definición de los Juegos y perdiendo en la final con Australia.





                                                                                                                                                                                                                                                                                       Se tenía como único antecedente un sexto puesto en Atlanta 1996. Esta disciplina se insertó en el programa desde Moscú 1980. Las muy buenas actuaciones en los Mundiales venían marcando el crecimiento, al menos en la edición más cercana de aquél momento en Utrecht 1998, con un cuarto lugar.

Se encendió la antorcha de los Juegos Olímpicos en Sidney del año 2000, y en el hockey sobre césped femenino las australianas eran grandes candidatas a lograr el oro, junto a las holandesas y las alemanas.

A todas ellas los pergaminos olímpicos y mundiales conquistados les sobraban. Eran claramente en ésa época, las principales potencias. El seleccionado nacional integró la zona A con las anfitrionas, Corea del Sur, España y Gran Bretaña. En el estreno, vencieron a las asiáticas 3 a 2 con los goles de Karina Masotta, Luciana Aymar y Jorgelina Rimoldi.

En la segunda fecha, la victoria fue por la mínima (1-0) ante las británicas con un nuevo gol de Masotta. Tras ello vendrían dos caídas, con las dueñas de casa por 3 a 1 y con las españolas por 1 a 0. El único festejo nacional en esas dos performances fue por intermedio de Soledad García.

Culminada la primera etapa, la segunda ronda se disputaba con arrastre de puntos, cosa que el equipo de Sergio “Cachito” Vigil no contaba con ése beneficio por perder en las dos oportunidades (Australia y España fueron las otras clasificadas y el arrastre se aplica con esos elencos que avanzan).

El apodo de “Las Leonas” surgió ante tamaño desafío de ganar los tres encuentros y esperar a que ninguno, excepto Australia, pudiera imponerse en dos ocasiones. El logo del equipo lo creó una de las integrantes del plantel argentino: Inés Arrondo, que se reunió con la cuñada del entrenador nacional, para definir cómo sería

Los dos partidos iniciales de la segunda fase mostraban una cuota de optimismo elemental para llegar a jugar por una medalla. Victorias 3-1 y 2-1 frente a Holanda y China respectivamente, con tres goles de Soledad García y dos de Luciana Aymar, repartidos en ambos cotejos.

Debían ahora ganarle a Nueva Zelanda y que España no lograra vencer a las holandesas. Una goleada categórica de 7-1 sobre las oceánicas, con facturas de Vanina Oneto en cuatro oportunidades, Cecilia Rognoni (dos veces) y Masotta.

Por fortuna, las españolas cayeron con el selectivo de los Países Bajos y de esa manera, la Argentina jugaba la final con Australia, que llegaba invicta. La definición, tal como marcaban los pronósticos y la lógica del hockey en ésos tiempos, fue para las australianas por 3 a 1, un 29 de septiembre del 2000, pero con una gran entrega nacional, con Oneto marcando el único grito nacional.

Fue la primera gran proeza nacional en este deporte, a pesar del llanto por el oro perdido, algo completamente lógico, pero pocos minutos después, cayeron en la cuenta de lo hecho, cuando las revoluciones del partido bajaron y pudieron digerir lo conseguido. La primera medalla de plata (vendrian tres más a nivel olímpico) en la historia de las que desde entonces llamaríamos “Las Leonas” que transformaría el futuro del hockey en un éxito detrás del otro.

Un plantel conformado por grandes exponentes que luego, serían protagonistas de muchas historias más llenas de podios y alegrías, tenía a Magdalena Aicega, Mariela Antoniska, Inés Arrondo, Luciana Aymar, María Paz Ferrari, Anabel Gambero, Soledad García, María de la Paz Hernández, Laura Maiztegui, Mercedes Margalot, Karina Masotta, Vanina Oneto, Jorgelina Rimoldi, Cecilia Rognoni, Ayelén Stepnik y Paola Vukojicic entre sus filas.

Las Leonas, hace quince años atrás, comenzaban una leyenda que hoy perdura

-ADN de Atletas-