miércoles, 12 de agosto de 2015

Tríada de la mujer deportista

-ADN de Atletas-

Por : BC

Muchos de ustedes habrán oído hablar de la famosa tríada que afecta a la mujer deportista a través de la: Alimentación – Menstruación – Sistema óseo



Aunque no están claras las verdaderas causas hay algunas teorías que intentan explicar esta disfunción. Es un aspecto realmente importante y a tener en cuenta para toda mujer que haga deporte . En este post os cuento qué es y como prevenirla.

Mujer y deporte

La presencia de la mujer en el deporte ha ido en aumento, y cada vez más se han situado en posiciones de rendimiento más cercanas a las atletas profesionales que a las amateur practicantes de deporte recreativo. Para poner un ejemplo, en el Ironman de Hawai de 1980 tomaron la salida 106 hombres y 2 mujeres, y la primera mujer acabó en 12ª posición en la general. Robin Beck realizó un tiempo de 11:21:24. A partir de 2012, de los 2000 participantes del IronMan de Hawai, el 26% eran mujeres (unas 570 atletas) y la mayoría de ellas habían completado varias veces un IronMan o un 70.3. Ese 2012 Leanda Cave realizó un tiempo de 09:15:54, la reducción de tiempo en esos 32 años es increíble, ¡más de dos horas!
 
Esta incorporación masiva de la mujer en el deporte de alto nivel ha incrementado los desórdenes nutricionales y reproductivos, las lesiones músculo esqueléticas y los problemas psicológicos.

Puede aparecer en los deportes colectivos pero sobretodo aparece en los deportes donde es importante el peso corporal bajo y donde hay importantes cargas de trabajo físico semanal. Hablamos de la resistencia por un lado y de los deportes estéticos por otro.

Falta de la menstruación, primer síntoma

Los trastornos menstruales son una de las clásicas manifestaciones de la tríada. La amenorrea secundaria es la falta de menstruación durante tres meses o más en mujeres que ya habían menstruado.


Esta aparece y es importante saber que es un factor de riesgo para desarrollar osteoporosis.

Está totalmente relacionado con el bajo peso corporal, la reducción del tejido graso y la función hormonal.
La amenorrea puede acarrear serios problemas, uno de los cuales se refiere a la osteoporosis.
 
Un estudio publicado en la revista Sport Medicine afirma que el 62% de la mujeres deportistas profesionales experimentan desórdenes y trastornos alimentarios. 

En otro artículo de la Asociación Americana de Dietética también afirman que el 67% de las féminas deportistas de competición han sufrido amenorrea. Si hablamos de nadadoras en cuanto a actividades, el mismo estudio de Sport Medicine nos dice que el 15% de las nadadoras padecen alguna de las siguientes alteraciones:

 
  • Bajo peso o pérdida rápida del mismo.
  • Estrés psicológico importante.
  • Secreción de cortisol excesiva.
  • Aumento de los niveles de prolactina.
  • Eje reproductivo inmaduro.
  • Sistema endocrino alterado.

En los períodos de descanso y en pretemporada, cuando se recupera peso y tejido graso, habitualmente se restaura de nuevo el ciclo menstrual.

Por lo tanto, en las mujeres deportistas es un proceso reversible, y lo más habitual es que una vez finalizada la época o período de deporte de alta intensidad la menstruación se inicie normalmente

¿Cómo prevenirla?

Para prevenir la tríada o simplemente evitar la amenorrea hay que modificar tanto hábitos alimentarios, como dieta y entrenamiento.

En atletas élite puede ser realmente complejo, de hecho, la amenorrea en este grupo se trata con anticonceptivos orales, ya que la mayoría necesitan preservar el bajo peso o no pueden modificar las cargas de trabajo físico y la duración e intensidad de los entrenamientos.
 
Respetar los descansos, fundamental. Muchas veces solamente respetando los descansos semanales y evitando el sobreentrenamiento ya es suficiente para evitarla.

Es muy común en la consulta que muchas atletas afirmen que no hacen los descansos completos sino lo que ellas mismas dicen “descansos activos”, con ejercicios de menor intensidad.
La necesidad de un descanso “completo” es esencial, aunque muchas veces no es suficiente.
 
Los controles antropométricos van a ser básicos para ir midiendo el tejido graso y muscular, controlar el peso corporal total y alertar a la deportista, entrenador y médico (o la familia si fuera el caso) en el caso de detectar problemas relacionados con la composición corporal que puedan perjudicar a la salud de la atleta.

Es importante que todas las mujeres deportistas sepan de estos factores llamados “la tríada de la atleta” y de sus consecuencias si no son controladas por personal sanitario especializado.
 
En resumen, la mejor manera de evitar la desnutrición, amenorrea y osteoporosis es:
  • Realizar los descansos “completos” pactados con el entrenador.
  • Realizar una dieta ordenada, siempre individualizada y siguiendo las pautas de un Dietista – Nutricionista.
  • Dieta pautada según carga de trabajo semanal, duración de los entrenamientos e intensidad de los mismos.
  • Tener en cuenta las patologías específicas (celiaquía o intolerancias, colon irritable, etc.) y deporte, que pueden afectar a la absorción de nutrientes.
  • Evitar el sobreentrenamiento.
  • Realizar análisis bioquímicos varias veces al año, donde estén incluidas las hormonas específicas relacionadas con la menstruación

-ADN de Atletas-